En este artículo explicamos claramente, para quienes no lo conozcáis, cómo se fija el precio de la luz en nuestro país.
Volvemos a hablar de que la gran novedad de este año 2014 ha sido la desaparición de la revisión de la tarifa eléctrica como resultado de la aplicación del nuevo modelo de precios. La TUR (tarifa de último recurso), ahora PVPC (precio voluntario pequeño consumidor) para todos los consumidores (con menos de 10kws de potencia contratada, los hogares) excepto para los que tienen derecho al bono social, que quedaron en la TUR.
Realmente el precio variable ya se llevaba ofreciendo a las empresas, de más de 15kws de potencia contratada, y es reciente, prácticamente de la mano de la imposición de la PVPC por parte del estado, el hecho de que las comercializadoras del mercado libre lo estén ofreciendo también al cliente residencial. Estas empresas ya son conscientes del ahorro que han generado en contraposición de un contrato a precio “cerrado”.
Pero, realmente seguimos hablando de ‘el mercado de la energía más cara’ y por supuesto, como todo lo que rodea al mercado eléctrico, tiene sus entresijos: al precio más alto, así es como se fija el precio de la electricidad en el mercado diario. La última central que se necesita para satisfacer la demanda es la que establece cuánto se pagará a las demás. Es la fórmula conocida como mercado marginalista. Este modelo retribuye con precios muy altos a centrales ya amortizadas como las nucleares o las hidráulicas.
Así funciona: según la demanda de consumo eléctrico la nuclear y la gran hidráulica son las primeras tecnologías que entran en el mercado eléctrico diario, también conocido como pool, y ofertan a cero por tener su inversión prácticamente amortizada. Después entran las renovables, que también ofertan a cero por no tener gastos de combustibles. El sistema de primas a las renovables se ideó precisamente con el objetivo de compensar los gastos de desarrollo e instalación de estas tecnologías. A continuación, entran el resto de centrales, especialmente las de gas y carbón. Las cuales marcan el precio para todas las demás.
Pongamos un ejemplo: en un día normal, una nuclear, una hidráulica o una eólica ofertan a cero pero, si la última central de gas necesaria para satisfacer la demanda oferta a 50€/Mwh, estas recibirán también 50€/Mwh.
A pesar de todo, esa connotación que tanto miedo da ‘variable’ y que nos suena a inestabilidad, en lo referente a la energía ‘luz’ hace que realmente el precio sea más barato al final del año que ha precio fijo. Lógico, cuando se entiende que el precio fijo es igual a una previsión a futuros del precio variable, con un margen extraordinario, aunque lo llamen prudencial, para aquellos que participaban en las famosas subastas trimestrales de determinación del precio de la energía (CESUR), los cuales no sólo eran compañías eléctricas, sino entidades bancarias, brokers financieros, y más, y que hacía que el precio se adulterara para que si el coste real de producción fuera mucho menor, que casi todos los días lo era. Eeste margen resultante se lo repartieran entre aquellos participantes. Un margen, que cuando era extremadamente alto y cantoso, el gobierno dictaminaba una ridícula devolución en las facturas de los consumidores en TUR, con carácter retroactivo. ¿Os suena?
Realmente el precio variable es muy barato el primer y segundo trimestre ya que hay mucha reserva de agua y hace viento, alcanzando el precio del megavatio valores verdaderamente bajos y sobre todo por la noche. En verano es más caro porque las reservas bajan, pero poco más que a una buena oferta a precio fijo algún mes, y en otoño es cuando realmente debería también estar más bajo pero como para cerrar el año con beneficios extra, y disminuir el margen de diferencia del precio fijo a variable, hay que hacer algo para encarecer la energía… aquí es donde cobran sentido las actuaciones por parte de las eléctricas (Iberdrola y Endesa, por excelencia) de manipulación que tanto se están denunciando por la CNMC y otros organismos durante estos últimos años.
Para puntualizar aún más, el precio variable es ideal para los hogares ya que en verano, salvo aires aconcidionados, es cuando mas horas de luz hay y por tanto se consumen menos kws. Y como en verano el kwh es un pelín más caro que a precio fijo…
En las empresas con consumo regular, el precio variable es ideal. Para las que tienen consumo por la noche como bares, congeladoras, inicios de actividad fuertes desde las 7:00 de la mañana o antes, es perfecto. Pero para las empresas con campañas en verano o a primeros de otoño como podrían ser bodegas de vinos, no es recomendable contratar a precio variable. Sí a un buen precio fijo.
Pero ojo, porque aquellas comercializadoras que ofrecen el precio variable, cobran el 100% de la potencia contratada sin facturarnos el 15% menos cuando los registros de la potencia demandada no rebasan el 85% de la contratada. Y esto puede salir muy caro. Algunas de ellas tienen la condición de que si superas una cantidad de kws contratados, sí que te aplican este “descuento”. Hay que saber elegir bien. Es necesario hacer cuentas y ver qué más compensa, cotejando los parámetros de: potencias contratadas, demandadas y Kws de consumo según meses.
Para eso está Zoahorro, para ofreceros este servicio de optimización y elección de la mejor comercializadora para siempre, adaptándonos a los cambios constantes del mercado eléctrico y siempre estudiando y analizando las mejores opciones para cada tipo de consumo de energía.
Para concluir, el precio variable, es un precio más transparente, más bajo que a precio fijo. Y ‘en teoría’ no debería subir nunca más drásticamente el precio del Mwh medio anual, ya que se va desarrollando e invirtiendo en I+D siempre para generar energía a un menor coste. Quizás por esto, el término fijo se ha tenido que encarecer hasta el doble y el triple en los últimos años. Porque si no, los beneficios para el ‘Oligopolio Energético’ bajarían progresiva y drásticamente. Por ello, desafortunadamente, hasta que no cambie el modelo energético por completo en España, seguiremos siendo uno de los países donde nuestra factura de la luz, es de las más caras del mundo.